El sonómetro es un aparato que además de medir el ruido, permite calcular aislamientos acústicos, tiempos de reverberación, etc.
Para medir aislamientos acústicos, se necesitan varios equipos:
- Sonómetro
- Calibrador
- Amplificador
- Fuente sonora (altavoz)
- Programas informáticos)
- Conocimientos acústicos y competencia en la materia.
El Sonómetro debe ser de tipo 1, exigible para realizar peritaciones acústicas capaces de cumplir con las exigencias de las normativas en cuando al grado de exactitud de la medida. Debe ser sometido a calibraciones y verificaciones periódicas en un laboratorio acreditado ENAC para tales fines y sus certificados son necesarios incluirlos en los dictámenes y peritaciones acústicas.
El calibrador es un aparato que sirve para comprobar el correcto funcionamiento del sonómetro antes y después de realizar una medición acústica. Al igual que con el sonómetro, ha de ser calibrado y verificado por un laboratorio acreditado ENAC.
El altavoz y el amplificador , forman parte de la cadena de equipos necesarios. En la estancia emisora, a través del altavoz se emite un nivel sonoro elevado denominado ruido rosa, lo suficientemente elevado para que llegue con nitidez al receptor. Se tomarán los valores del nivel sonoro en el emisor y en el receptor para poder calcular el aislamiento acústico como diferencia entre lo emitido y lo recibido. Además en el receptor se medirá el ruido de fondo y el tiempo de reverberación.
Mediante los datos obtenidos y con programas informáticos , podremos calcular el aislamiento acústico entre las dos estancias analizadas. No se trata de conocer el aislamiento del elemento separador, techo o pared normalmente, sino del aislamiento entre dos recintos. El ruido emisor viajará no sólo a través del paramento de separación, sino también a través de los denominados flanqueos, es decir el resto de los elementos constructivos que conforman el recinto emisor, y llegará al receptor de forma directa por el elemento separador y por los flanqueos de los elementos constructivos del recetor.
La capacidad técnica de interpretación de los resultados a través del conocimiento acústico adquirido y de las experiencias profesionales propias, condicionarán los resultados y las conclusiones de los mismos.
Considero que una persona con conocimientos amplios en la construcción (arquitecto), con conocimientos específicos de acústica arquitectónica ( especialista consultor acústico ), será una de las personas que estará en condiciones óptimas para aportar soluciones constructivas acústicas a cada uno de los problemas detectados.
Con los datos recogidos y los cálculos realizados nos permitirán comparar los resultados con la Normativa Acústica para conocer si cumplimos con las exigencias de aislamiento acústico y de las transmisiones sonoras, así como de las penalizaciones a aplicar por el grado de molestia que produzca el ruido.
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